¿Depresión posparto o “Baby blues”?
La llegada de un bebé puede ser una situación bastante estresante. Sin importar cuanto queramos a nuestros peques o cuanto nos hayamos preparado para su llegada, un nuevo bebé implica muchos cambios en la vida de los padres, particularmente de las madres. Ajustarse a los nuevos horarios, las nuevas rutinas, la falta de sueño, la limitada interacción social, los cambios hormonales y el poco tiempo personal pueden hacer que muchas madres sientan que están viviendo en una montaña rusa emocional. De hecho, a estos cambios emocionales generados con la llegada de un bebé suele llamársele “baby blues”.
El miedo, estrés o ansiedad típicos del baby blues suelen vivirlo entre el 50 y 85% de las mujeres. Es una experiencia natural esperada de los cambios hormonales que genera el parto junto con el aislamiento, la deprivación, la fatiga y el cansancio de las primeras semanas posparto.
Tips Lullaai para ayudarte a manejar el Baby Blues:
- Rodéate de tus seres queridos: Hazle saber a tu pareja, familia o personas de tu entorno que no te sientes bien y que necesitas más ayuda con los cuidados del bebé y las tareas cotidianas.
- Cuida de ti misma: Busca momentos a solas que te brinden bienestar por ejemplo tomar un baño, salir a caminar, ver una película y sobre todo dormir. Recuerda que en la sección de autocuidado podrás encontrar algunos tips que te ayudarán en este aspecto.
- Comparte con tu peque: Por ejemplo, dando un paseo por el parque o, cuando puedas, toma a tu bebé en posición canguro (contacto piel a piel). Esta posición, además de traer múltiples beneficios para la salud y el desarrollo de tu peque, ayuda a acelerar tu recuperación física después del parto, reduce tus niveles de estrés y favorece el vínculo con tu bebé.
- Círculos de mujeres y madres: puedes unirte a un grupo de apoyo de mujeres que, al igual que tú, están descubriendo la experiencia de ser madres.
Sin embargo, si los síntomas del baby blues duran varias semanas es importante contemplar la posibilidad de que ocurra una depresión posparto. A pesar de que la depresión posparto es un problema mucho más perjudicial para la salud mental de las madres, ha sido muchas veces ignorado o subestimado. Aunque hay muchos síntomas que comparte con el baby blues, en la depresión posparto los síntomas son mucho más severos. Por eso es importante tener en cuenta alguna de las principales alertas rojas:
- Puedes sentir que tienes dificultades para conectar con tu pareja o con tu bebé.
- Puedes sentirte más ansiosa de lo usual, haciendo que sea mucho más difícil conciliar el sueño.
- Puedes sentirte culpable, abrumada, poco importante o valorada.
- Es posible que surjan pensamientos de excesiva preocupación por la muerte.
No hay solo un factor que desencadene la depresión pos parto. La combinación de cambios hormonales, físicos y mucho estrés pueden deteriorar tu salud mental. Es en estos momentos cuando más importante es enfocarte en tu salud y bienestar.
¿Qué puedes hacer si crees que tú o alguien que quieres tiene depresión posparto?
- ¡Pedir ayuda! Es momento de buscar en tu círculo cercano personas que te puedan apoyar con el cuidado de tu peque para que puedas tener momentos para ti durante el día.
- Empieza a ir a un psicólogo. La ayuda profesional es clave para poder transitar estos momentos.
- Cuida de ti misma. Haz cosas que te motiven y ayuden a tu salud, duerme bien, come sano y procura buscar momentos en el día en los que puedas moverte y tomar el sol. Recuerda que en la sección de autocuidado podrás encontrar otros tips.
Finalmente, quisiéramos recordarte que no estás sola y que muchas otras madres están pasando por lo mismo que tú. Habla con alguien con quien te puedas sentir comprendida.